Reseña La llave de blake

Poco hablo por aquí de lo que me apasiona el arte, porque no procede, así que este libro tenía que llegar a mis manos.

Título La llave de Blake

Autor  Sandra Andrés 

Editorial Dnx

Páginas 444

Saga Autoconclusivo

Muchísimas gracias a la editorial Dnx  por el ejemplar.

Sinopsis

12 de agosto de 1827, Londres. Un cuadro. Una obra de arte cuyo creador se obstina en concluir frenéticamente en la penumbra de su habitación. De repente algo se mueve en las sombras y una intensa oscuridad lo invade todo. Aquella sería la última creación de William Blake. En la actualidad, Rachel es una joven con una gran inteligencia a la que desde pequeña sus padres han enseñado a buscar y descifrar los tesoros ocultos en el arte: pequeños mensajes y enigmas que no son visibles para la mayoría de las personas. Junto a su amigo Andreu, Rachel tiene un programa de radio en Internet donde hablan de cosas paranormales, del más allá y de experiencias que les han pasado a los oyentes. Será en una de esas sesiones cuando recibe un mensaje que la dejará petrificada.

Rachel es una joven con una mente privilegiada, curiosa y despierta a la que sus padres siempre le han retado a ir más allá con el arte. Vive una monotonía triste, sobrellevando el duelo por la muerte de su madre, el extraño distanciamiento que ha hecho su padre con ella y con un podcast sobre lo sobrenatural que lleva con su mejor amigo.
Todo parece tranquilo hasta que su padre muere en extrañas circunstancias y parece que está relacionado con el pintor William Blake y su obra así que emprenderá un viaje tanto terrenal como introspectivo para intentar encajar todas las piezas de un puzzle que hasta la fecha no sabía ni que existía.

Con esto de la cuarentena estoy un poco reticente a leer así que solo pasan por mis manos hasta el final libros que consigan engancharme. Y este lo hizo. Con una prosa muy cuidada la autora nos introduce en un mundo lleno de enigmas y buscando darle sentido a la obra artística de William Blake, que fue tan incomprendido tanto en su época como en la actualidad.

La autora juega bien con dichos elementos buscando un hilo conductor que lo una todo en la trama. Aunque la conclusión a la que llega es la más lógica, también creo que es la más cliché. Aun así el proceso y el viaje por el libro es vertiginoso, la acción empieza pronto y es imposible aburrirse, aunque resulte en ocasiones evidente.
Las localizaciones son reales y los cuadros también lo que ayuda mucho a sumergirse en el libro, lo que también en ocasiones es un riesgo de spoiler si entras en algún artículo para saber más durante la historia.

Aunque sobretodo es un libro de incógnitas y de aventuras, tiene un toque de terror sobrenatural al principio que hizo que me encontrara que solo podía leerlo de día, igualmente el terror como tal es solo al principio aunque lo sobrenatural está presente en toda la historia.

Los personajes me han resultado bastante cliché. Casi todo el libro está narrado a través de los ojos de Rachel,  hay capítulos con saltos temporales al pasado narrados por otros personajes , no he conseguido empatizar con ella más allá de la curiosidad que sentíamos las dos por lo que estaba ocurriendo. Los otros dos protagonistas me han resultado bastante cliché también y bastante previsible lo que me choca esa simpleza con la trama sobre William Blake y el pasado que está muchísimo más trabajada aunque también previsible.

No sé cómo expresarlo sin hacer spoiler pero con lo fantasiosa que es la obra de William Blake, me parece que hacia donde lo ha encaminado la autora es demasiado obvia. Aun así, aún con esa simpleza en sus personajes , aún con hacia dónde va encaminado el libro, la opción que trata, es un libro que me ha durado un día. Eso demuestra que si estás en ese momento que conectas con el libro, da igual lo demás. Que esos peros pueden ser perfectamente porque me apasione la historia del arte y que ahí el libro no sea para mí pero sí para alguien que simplemente tenga curiosidad. Y aunque no es un libro para mí, lo he leído en un día. Y el final, aunque también previsible, no evitó que me diera un vuelco el corazón.
Los clichés sí están bien llevados, pueden ser una maravilla.

Conclusión 
La llave de Blake es un libro de aventuras e incógnitas con toques de terror y sobrenatural que te engancha desde la primera página a la última.